La estación de grabados rupestres de La Erita (Pico de la Sabina) se emplaza sobre el mismo borde de la Caldera de Taburiente. Es uno de los yacimientos arqueológicos más antiguos de la Isla, ya que fue descubierto en 1922. Su nombre obedece al hacho de que los petroglifos se disponen en los paredones verticales de un enorme dique de basalto que adquiere una forma semicircular. La estación cuenta con unos 60 paneles de motivos geométricos, entre los que destacan los grupos de las espirales y meandriformes, así como trazos curvilíneos muy sencillos que podrían corresponderse con símbolos alfabetiformes. La técnica de ejecución fue el picado de anchura y profundidad variables. El emplazamiento es estratégico puesto que permite el control de buena parte del interior de La Caldera, así como de las laderas exteriores del cantón de Tedote. El yacimiento fue protegido con un vallado metálico por el Parque Nacional de La Caldera en 1988 debido al deterioro provocado por los numerosos visitantes de estos parajes, ya que es atravesado por el sendero que recorre los bordes de La Caldera.
Hitos:
Forma de Acceso:
Municipio:
Información:
Parque Nacional Caldera de Taburiente, Centro de Visitantes
Tipo de Recurso
Tipo de Ingreso: